IX Capítulo de Murrieta Academy: Vinos Históricos, Castillo Ygay Gran Reserva Especial

 

Como colofón a esta primera serie de Murrieta Academy, no queríamos dejar de hacer una alusión a los vinos históricos. Podríamos hablar del vino en su conjunto como una bebida histórica porque ha acompañado a la humanidad desde hace nada menos que 8.000 años, pero hoy nos vamos a referir únicamente a un pequeño elenco de etiquetas que trascienden épocas y modas. Suelen ser vinos que proceden de bodegas o regiones con gran valor histórico y que sobre todo han sido capaces de actualizarse sin perder el respeto por la tradición y sus orígenes.

Además, para que un vino llegue a ser legendario ha de tener una calidad indiscutible que le permita crecer y lograr emocionar al tomarlo décadas después de ser embotellado: debe ser elaborado en una añada de las consideradas míticas o proceder de un viñedo único. Con todos estos mimbres se elabora un vino histórico como Castillo Ygay.

Castillo Ygay se sitúa dentro de este selecto grupo porque es un vino cuyos orígenes se remontan al siglo XIX y que está íntimamente ligado a la Historia del vino en Rioja, ya que su creador, Luciano Murrieta, fue quien primero introdujo en la región las técnicas empleadas en Burdeos y comenzó a elaborar un vino capaz de envejecer y de viajar por su alta calidad, algo impensable hasta ese momento en Rioja.

 

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Únicamente elaborado en añadas excelentes, Castillo Ygay Gran Reserva Especial, procede de un viñedo único, el pago “La Plana” de la finca Ygay, que le dota de una singular personalidad. Situado por los críticos entre los mejores vinos del mundo y deseado por coleccionistas y amantes de los vinos con más altos niveles cualitativos. Elegante, sutil y equilibrado, los años que pasa en barrica y en botella le aportan un abanico impresionante de aromas: frutos rojos, hojas de tabaco, balsámicos, grafito, cuero… sin perder la frescura de su juventud.

Perfecto para maridar con platos de pescado, como rodaballo o kokotxas de merluza al pil pil, o con carnes como un solomillo de buey al horno. E igualmente perfecto para guardar y comenzar nuestra pequeña colección de vinos históricos.

¡Salud!